"Lo que podemos llamar caldo de cultivo se dio en los primeros años cuarenta como una evocación de los cantos de "Los Gozos del Cristo» (danos amparo y consuelo) y con la colaboración, en su día, insospechada, de una familia de bonilleros, ya asentada en Valencia, que, sin proponérselo, sirvió de referencia y amalgama, acogiendo a cuantos bonilleros que por allí pasaban.


"Los años cuarenta fueron años muy duros. Fueron años de soledades, de nostalgias. Años en que necesitabas a tu gente, a los tuyos. En fin, años en que necesitabas "amparo y consuelo», y así surgió nuestro Cristo, porque lo necesitábamos. Surgió solo, nadie dijo hagámoslo. En silencio todos lo decían. Se buscó una estampa grande (no sé de quién sería), se enmarcó y, llevándola a la Iglesia de los Padres Dominicos, se celebró la primera misa el 4 de marzo (creo que fue en el 44), se hicieron recordatorios, pero se borró con el tiempo la inscripción».



"Con nuestra estampa seguimos celebrando el cuatro de marzo todos los años con una función religiosa, con asistencia masiva de todos los bonilleros que vivían en esta provincia y se empezó a pensar la manera de poder conseguir la imagen de nuestro Cristo, para lo cual se hizo una colecta y, sobre todo, descendientes de El Bonillo se ofrecieron a financiar lo que faltara, que era bastante, pues no eran tiempos muy boyantes. Estos fueron los padrinos cuando se bendijo la imagen». (*)

"Se encargó su construcción a los señores Avilés y Puertas (ya fallecidos) diciéndoles que lo hicieran más pequeño, a escala bastante reducida, siendo terminado el 1950. Por lo tanto, el 4 de marzo de ese mismo año se bendijo la imagen por el Rvdo. Prior de los Padres Dominicos. Un acto que, junto con los del 44, merecieron la pena vivirlos».

Los Padres Dominicos opinan que la Imagen estaría mejor en la Iglesia Parroquial de ese barrio, Parroquia de San Juan y San Vicente, sita en la calle Isabel la Católica, que es en el templo en el que continúa. Desde esa fecha se ha incrementado el culto pues, al aumentar el número de bonilleros que han veni

a vivir a estas tierras, junto con los hijos y nietos de los primeros bonilleros, le. asistencia a los actos religiosos del 4 de marzo es impresionante; la Iglesia se llena por completo y, sobre todo, mucha juventud.

"Delante del Cristo se han casado bastantes bonilleros. Se dicen mucha: misas. Y raro es el día festivo que no tiene el altar ramos de flores, algunos de novia y gente rezándole».

"Al hablar de la Parroquia de San Juan y San Vicente tengo que mencion al actual Cura Párroco, don José de Paz, que, identificado completamente ca nuestro Santísimo Cristo y con nuestro pueblo, nos alienta con sus homilías llenas de hondas ideas y sencillas palabras con sabor bonillero».

(Escrito por don Manuel Sanz Marín, bonillero de la diáspora).

(*) Fueron los padrinos doña Enriqueta Marín, Viuda de Trigo y don José Marín Buendía.

Los organizadores más activos fueron doña Delia Gutiérrez Utrilla y doña Pepita Sanz Utrilla.